Día 182º de la pandemia del Covid-19. Continúo asintomático.
Decía Cervantes a través de la voz de Don Quijote que acudir al refranero y al
aforismo a la hora de hacerse entender no era arte elegante. Así lo recomendaba
a Sancho quien sin hacer caso de tal consejo se defendía a base de frases
hechas que respondían a todas las situaciones que se le presentaban.
Nosotros somos genéticamente quijotes y sanchos.
Sabemos que no hay que vender la piel del oso antes de cazarlo. No importa,
porque aunque la crisis del coronavirus no está superada la mayoría ya celebra
haber asumido esa nueva normalidad sin atender a sorpresas venideras.
Lo hacen también los partidos políticos que preparan una
campaña agresiva ante unas elecciones que tarde o temprano acabarán llegando. Mientras
Grande-Marlaska quiere acallar las movidas de Interior al anunciar la
equiparación salarial para Policía y Guardia Civil, el Sr. Iglesias ha tomado claramente ventaja
al ponerse la medalla de los logros sociales, pisoteando el retrato de su
presidente, el Sr. Sánchez. Sabe muy bien que ese recién aprobado ingreso
mínimo vital después de haber incentivado las colas del hambre con su gestión
no deja de ser una excelente maniobra que le permite comprar el voto de un
millón de españoles con el dinero de todos.
Como diría Sancho: Pan
para hoy y hambre para mañana. Y el propio Sancho continuaría: toma un pescado porque no me interesa que
aprendas a pescar.
1 comentario:
Hola Jose Maria,
Me alegra ver lo mucho y bien que escribes.
Saludos cordiales,
Mariano
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