jueves, 30 de abril de 2015

Nepal


         La reciente tragedia que ha azotado el Nepal nos invita a hacer pequeñas reflexiones en voz alta para tratar de colocar a cada uno en su sitio.

         Por un lado este remoto país sirve de ejemplo para aquellos que basan su futuro en la economía del servil turismo. Desde que la gente del primer mundo pone a prueba su aburrimiento con retos extremos, ascender al Everest y montes próximos ha significado una fuente de ingresos que habrá dado de malcomer a muchos, enriquecido a pocos y no ha revertido en nada en los servicios locales. Se repite la triste historia para los pobres

         En cambio, mejor parado queda el gobierno español que en doble frente ha respondido enviando las primeras ayudas para atender a los damnificados y a su vez ha montado un servicio de repatriación para los turistas españoles facilitándoles el regreso sin dilaciones. Algo ha funcionado bien.

         ¿Y los medios de comunicación? Encantados con la distorsión informativa: la mayor preocupación se centra en localizar a esos montañeros españoles desaparecidos... porque los diez mil muertos y millones de damnificados ni ven nuestra televisión ni compran nuestros periódicos.

         Lo mismo que con el tsunami de 2004. Hay cosas que no cambian.



lunes, 27 de abril de 2015

Piedras


        Quien esté libre de pecado que lance la primera piedra. Los Evangelios atestiguan el éxito de esta sentencia tan lapidaria como su contenido salvando la vida de aquella mujer adúltera. A lo largo de los Evangelios se narran milagros, verdaderos retos contra la naturaleza como la conversión del agua en vino, la multiplicación de panes y peces o la resurrección de Lázaro. Nimiedades si lo comparamos con lo de contener a una masa furibunda con tan solo una frase.

Y perdonen que manifieste mi incredulidad porque aquel día no se detuvieron las lapidaciones. Es más con la perspectiva del tiempo tengo la impresión de que han aumentado. Si alguien algún día arrojó una china se le contestó con un guijarro, luego con un adoquín y después con un pedrusco hasta lanzar rocas con catapultas. El descubrimiento de la pólvora las hizo estallar y la fisión nuclear potenció al límite del apocalipsis su capacidad destructiva.

 Hoy se lanzan tantas piedras que tapan el sol para hacernos vivir bajo una penumbra descorazonadora. Cualquiera se siente libre de culpa y legitima su violencia como un mal menor, como si el dolor fuese mesurable. Porque, por mucho que insistan los Evangelios, aquello no fue un milagro, si fue, fue una casualidad.


viernes, 24 de abril de 2015

El libro


         En cierta manera cada vez que se celebra El Día del Libro no me veo identificado con esta forma de fomentar la lectura. No, porque más bien parece que se pretenda vender libros, sin tener en cuenta su contenido. Se presta a muchas interpretaciones y el público fácilmente tiende a la confusión.

         Bajo el formato de libro hay un mercado que no está directamente ligado con la cultura. Un libro es un soporte, un vehículo de comunicación y nada más, máxime desde que la imprenta agilizó su divulgación. Hoy libros del famoseo y del cotilleo comparten escaparate con los grandes de la historia y listas de ventas con los más leídos. Y aunque libros son, están muy lejos de transmitir cultura y distan una eternidad/luz para que se aprecie un boceto de arte literario.

         Soy partidario de otros términos más apropiados que diferencien el auténtico texto literario de ese conjunto de páginas cosidas sobre un lomo para vender. Porque nuestros grandes inspiradores no escribieron libros sino obras de Literatura. Son estas las que merecen al menos un día al año para ser recordadas y leídas en medio de tanta vulgaridad camuflada.

         Celebremos el día de la obra literaria en soporte word, pdf, e-book o en lo que sea y pasemos de el libro.


martes, 21 de abril de 2015

Cascabeles


         Esopo nos ponía como ejemplo en una de sus fábulas una asamblea de ratones que había aprobado poner un cascabel al gato para que así todos pudiesen escucharlo antes de que estuviese lo suficientemente cerca. Lástima que tan excelente idea no tuviese ningún voluntario para llevarla a cabo.

         Igual de fácil resulta encontrar la solución idónea para la mayoría de los problemas. No hace falta ser ni un politólogo ni ningún premio Nobel de la Paz para apelar a la buena voluntad, a la comprensión y al diálogo como medio de resolución de conflictos. Por la geografía mundial se reparten muchas, demasiadas tensiones donde las víctimas se confunden con los agresores tras enquistados enfrentamientos cuyos orígenes se han perdido en cualquier rincón de la desmemoriada historia de la humanidad.

         Sobran cascabeles y sobre todo cascabelistas que una y otra vez, dadas sus inútiles propuestas, no hacen más que alentar a los inmovilistas y demás resignados con su suerte. Ya que no surgen remedios para nuestros males al gusto de todos deberíamos aplicar aquellos que por su pragmatismo y viabilidad al menos permitan mejorar las condiciones y den paso a una convivencia menos injusta.


sábado, 18 de abril de 2015

Paella


La antropología moderna nos enseña a diferenciar el objeto material de su sustancia emocional y, a su vez, fijar la estrecha relación que dentro de una sociedad se puede desarrollar entre ambos conceptos. No es una cuestión de tecnologías ni de habilidades, sino que con ella se establecen unas señas de identidad que descontextualizadas pierden todo sentido.

Para los valencianos la paella, tomándola como referente gastronómico más representativo, recoge todos estos aspectos señalados. La paella reúne todos los requisitos: tanto sus ingredientes como su elaboración son sencillos, sin embargo, llega a haber una diferencia abismal entre una buena y una mala paella. A esto se añade que todos los comensales la comparten desde la misma paellera en señal de confraternidad o de abierta amistad cuando hay invitados.

No todo el mundo puede hacer una paella. Cualquier alteración, sea cambiar los ingredientes, sea la forma de servirla resulta ofensivo e hiriente para los sentimientos de los valencianos. Porque un plato con arroz lo puede cocinar cualquiera, pero una paella, en el sentido estricto, profundo y antropológico del concepto, solo la puede hacer un valenciano. Así de sencillo.


miércoles, 15 de abril de 2015

Vinilos


Hubo un tiempo en que el vinilo sufrió la presión de los avances tecnológicos. Hay que reconocer que el cassette no fue rival, pero cuando apareció el cd el pulso quedó servido. Los melómanos se dividieron por los que apostaban por el soporte digital frente a los que se resistían a abandonar el plástico porque ya formaba parte de su propia vida.

No olvidemos que la historia de la música pop mantuvo un idilio con el vinilo desde sus propios orígenes. Fue en los años 60, especialmente en sus últimos años, cuando los grupos de rock ampliaron su concepto musical extendiéndolo hasta las portadas de los discos. La presentación ya hablaba del contenido. Y el vinilo más que cuerpo, se convirtió en alma y punto de comunión entre artistas y seguidores. Poner un disco exigía un ritual. El plato era el altar a 33/3 r.p.m y la caída de la aguja sobre los surcos la consumación del acto.

Hoy los coleccionistas de vinilos prescinden del contenido musical buscando la rareza y la exclusividad. Sus defensores también han claudicado ante la tecnología con modernas reediciones. Con todo todavía podemos encontrar a algún nostálgico que disfruta oyendo su canción favorita entre gotas de lluvia o huevos fritos.


domingo, 12 de abril de 2015

Días Malos


         Mañana será otro día... porque lo que es hoy, creo que he sobrepasado el límite de despropósitos. Como siempre, el más lamentable de todos el primero: levantarse.

         Hay días que es mejor no apagar el despertador, hundirse entre la almohada, perderse entre las sábanas y esperar a que pasen enteras las 24 horas. Maldita costumbre esa de apagarlo, levantarse y ponerse en marcha. Y seguir adelante, pese a que las señales ya van anunciando lo que queda por venir. Si se cae la tostada al suelo, si el ascensor está detenido entre pisos, si el coche no arranca...

         Maldita insistencia por seguir alejándose de la cama. Porque toca encontrarse con gente impertinente y medir frases neutras que suenan a improcedentes. Así hasta que las malas noticias se encadenan sucediéndose en pausado y armonioso ritmo: un aviso de una multa atrasada ahora con recargo, visita al médico que me castiga con los resultados del último análisis y una llamada del mecánico con el presupuesto de la reparación del coche (ese que no arrancaba).

         Y para terminar, llueve, no llevo paraguas y mientras espero en la acera para cruzar la calle un coche me ha salpicado.


jueves, 9 de abril de 2015

Contaminaciones


Con insistencia percibimos la presencia de ONG, ecólogos y científicos denunciando la contaminación y el deterioro ambiental que nos acabará llevando a un apocalíptico cambio climático. Ciertamente es un tema delicado que se debe afrontar con muchísima seriedad. Pero ¿qué me dicen de la polución verbal e ideológica que ha invadido y se ha apoderado de millones de cerebros humanos?

Este mal se sigue extendiendo por ámbitos insospechados superando su territorio original. Empujado por la ignorancia y el analfabetismo ha sabido adaptarse muy bien a los nuevos tiempos y aprovecha de forma muy efectiva los medios de comunicación.

         La contaminación intelectual podría definirse como una sobrecarga de información mal entendida y peor procesada, una convergencia de ideas opuestas que cohabitan en la mente de sus víctimas y las condenan al ridículo público cuando pretenden manifestarse travestidas de intelectuales.

         No hace falta apurar las explicaciones que dan los artistas pseudovanguardistas para hacer entender el mensaje que encierra su producto, que no su obra de arte; tan solo con presenciar el empacho ideológico que preside toda tertulia política en televisión para comprobar con fatal pesimismo que estamos asistiendo a un cambio lingüístico producido por la contaminación verbal.


lunes, 6 de abril de 2015

Banderas


Cuando se tiene la oportunidad de estar en Nueva York no se puede dejar de lado hacer una visita a la sede de la ONU en Manhattan. La visión de las banderas ondeando en flamígera coordinación multicolor hipnotiza al curioso. Esa espectacular armonía cobra especial significado si además optamos por una perspectiva que incluya la Pistola anudada  del sueco Carl Fredrik Reuterswärd como símbolo antiarmamentista y pacifista.

Allí, alineadas por orden alfabético, reconocen uno a uno todos los estados que conforman la fallida propuesta de paz al mundo. Cada bandera para alcanzar el tope de su mástil ha tenido que recorrer una historia, siempre forjada, siempre en constante cambio.

El espectáculo de esa pluralidad de banderas siempre renovadas refleja las diferencias que separan a las naciones. Una distancia medida con intereses enfrentados y sangrientos episodios, donde las efímeras alianzas multiplican el poder de la violencia. Estas hermosas banderas han heredado esa lacra del pasado y hoy todavía son incapaces de alentar entre todos los seres humanos el ideal de un concierto universal. Porque de momento parece imposible crear una bandera sin levantar una frontera.

Algo falla.


viernes, 3 de abril de 2015

Semana Santa


         El integrismo religioso se manifiesta de diversas maneras. No es exclusivo de ningún credo en particular, pese a que se ponga especial énfasis en denunciarlo si tiene relación con cualquier atentado terrorista. Existen otras formas de expresar públicamente una interpretación radical de las creencias religiosas que también presionan sobre la sociedad porque perviven incrustadas en las costumbres y tradiciones.

         El cristianismo celebra las Pascuas a través de infinidad de ceremonias, rituales y procesiones que pasan, con una alternancia propia de una crisis ciclotímica, desde la tristeza más profunda por la pasión y muerte de Jesús hasta la desbordada alegría de su resurrección. Año tras año. Como si el tiempo no transcurriese y los hechos tuviesen lugar por primera vez en cada ocasión.

         Y no es cuestión de censurar a aquellos que invitan a reflexionar en profundidad sobre el sentido de la vida, porque es un ejercicio muy interesante para la mente. Sino que se trata de hacer observar su integrismo radical a toda esa gente que participa de esas histriónicas crucifixiones en Filipinas, pasando por los picaos que se autoflagelan en La Rioja, sin olvidar ese tétrico Vía crucis junto al Coliseo romano dirigido por el mismo Papa en recuerdo de los mártires cristianos.