miércoles, 3 de junio de 2020

Día 186º de la pandemia del Covid-19


Día 186º de la pandemia del Covid-19. Continúo asintomático.  Con lo vivido en esta pandemia se pueden establecer diversas categorías de mentiras porque hay que reconocer que estamos asistiendo a una exhibición del tema tanto en variedad como en profusión. Si dijésemos que salimos a una mentira diaria sería mentir porque nos quedamos muy cortos.

Nos mintió el Sr. Sánchez cuando solicitó los primeros quince días de estado de alarma explicando que sería una medida puntual para frenar los contagios. Lo hizo para no desanimar a la gente, ya que si desde el primer momento llega anunciar que iban a ser no uno, sino seis los que iba a necesitar hubiésemos caído en depresión.

También nos mintieron para envolver en una falsa normalidad general su actividad del 8 de marzo, sabiendo que la luz roja ya no centelleaba sino que lucía fija y bien fija. Fue una mentira interesada.

Mentir, lo que se dice mentir sobre el número de fallecidos, eso ya no es mentir, es más bien una burla descarnada. No es que suban o bajen los números, ni que se les haya bloqueado el contador de fallecidos en España cuando las comunidades cuentan cerca de una treintena en los dos últimos días. Es que los 27127 muertos según Sanidad a fecha de hoy es la gran mentira piadosa que ya no consuela a nadie.

Y nos queda un último tipo de mentira, la de Grande-Marlaska. Mentira a la que el ministro se aferra para salvar su pellejo pese a que está rebatida con documento en mano.

Ya no importa que sean para evitar el desánimo popular, ni por defender intereses partidistas, ni que sean piadosas por evitar dolor o descaradas para salvarse... son mentiras tras mentiras sobre mentiras y así no nos puede ir bien.

Sigamos confiando en nuestras autoridades (porque no hay otras).



No hay comentarios: