viernes, 28 de febrero de 2014

Historias


La elección de un nombre para una disciplina ofrece resultados más que sugerentes. Las Matemáticas, por ejemplo, pese a desarrollarse sobre cálculos y operaciones exactas eligieron un sustantivo plural como referencia a la multitud de campos que aportan al mundo de las Ciencias. En cambio, la Historia, disciplina humanística, en su singular da cobijo a las innumerables interpretaciones que el pasado de la humanidad puede provocar según se maneje la documentación.

Si se hubiese elegido el nombre de Historias hubiese sido mucho más acertado. Hay tantas Historias como historiadores. Cada uno nos cuenta una versión y llega a unas conclusiones que pueden ser frontalmente diferentes pese a recurrir a las mismas fuentes. Aunque peores son aquellos, verdaderos agentes de la descontextualización, al juzgar con referentes actuales episodios que se produjeron en otros tiempos.

Así, imbuyendo en pleno desconcierto al curioso que le gustaría saber, lo que para unos fue una hazaña para otros fue una tropelía, dependiendo de la ideología del historiador. Con ellos, la Historia, con mayúscula y en singular, cae en desprestigio y, en verdad, qué difícil se hace recuperarlo.

 

martes, 25 de febrero de 2014

Altibajos


Si representásemos nuestro estado de ánimo, siempre susceptible a cambiar según los estímulos y situaciones del día, siguiendo el trazado de un gráfico lineal llegaríamos a la conclusión de que ofrecemos un perfil de inestabilidad que roza la patología mental.

No se escapa nadie, y mucho menos, si uno mismo se encarga de ir colocando las puntuaciones diariamente. Con pasmosa irregularidad pasaríamos de la zona alta a la baja, marcando unos picos que en ocasiones alcanzarían una distancia de vértigo, como si el Everest colindase con las fosa de las Marianas. Podríamos hablar emocionalmente de inestabilidad o bipolaridad sencillamente porque en un momento hipomaníaco nos comeríamos el mundo y sin necesidad de sufrir ninguna indigestión en un cambio de aires pasaríamos a una aplastante depresión que nos reduciría al óvulo materno.

         Placer o dolor, deseo o inapetencia, alborozo o tristeza... todos significados opuestos, se necesitan mutuamente para sentir la vida. Y como el equilibrio emocional no existe, no es cuestión de reprimir esos sentimientos, sino de aprender a convivir con ellos y poder disfrutar el hecho de que somos doblemente humanos.

 

sábado, 22 de febrero de 2014

Pintura


Cuando la Pintura renunció a la magia en las cuevas del Paleolítico se prostituyó a la voluntad de sus mecenas. Entonces dejó de ser un arte independiente para ofrecerse por encargo. Por eso los pintores son vendedores de obras y su cotización realmente no depende de la calidad de sus trabajos, sino más bien del precio que alcanzan en un mercado manipulado por los merchantes.

No conozco pintor importante que haya trabajado exclusivamente por el arte. Siempre se han entregado supeditados a los distintos mecenazgos a lo largo de la historia. Miguel Ángel, el más grande de su época, estuvo al servicio de la omnipresente Iglesia. Nuestro genio Goya fue el pintor de la aristocracia y la realeza... y si llegamos al autodestructivo Van Gogh, su búsqueda de la muerte se precipitó porque no vendía un cuadro.

         Sin evitar polemizar, con todo este muestreo, llegamos a la conclusión de que la Pintura, más que un arte, es una técnica al servicio del dinero. Si en épocas pasadas satisfizo el gusto de las instituciones religiosas o la nobleza, hoy se ofrece impúdicamente a los más grandes coleccionistas privados. Burdo encubrimiento de un gusto decadente que se arropa en la singularidad de un cuadro para distinguirse del vulgo que ha de conformarse con la reproducción en serie del diseño o la artesanía.

 

miércoles, 19 de febrero de 2014

Piratas


        Los gobiernos occidentales al servicio de las multinacionales van tomando la costumbre de, según qué período de su legislación, aprobar alguna ley anti pirateo. En su desfachatez ilustran las noticias con cifras astronómicas señalando el dinero que pierde la industria, los impuestos que se evaden y los miles de puestos de trabajo que se pierden por culpa de esta práctica, así la califican, ilegal.

        A esos datos tan manipulados que nos tratan de embutir se les contesta con otros abrumadoramente superiores, producto de una renovación tecnológica y una adaptación a los cambios que el mundo de la música alternativa y el cine independiente han sabido aprovechar. Hoy el número de músicos y actores que viven de su trabajo se ha multiplicado por diez en el mundo y es difícil cuantificar su capacidad de creación artística, constante y desbordante.

        Sospecho que detrás de estas propuestas oficiales, además de un colaboracionismo con el oscuro negocio de la industria musical y cinematográfica, hay otro interés mucho más peligroso: crear una conciencia generalizada de culpabilidad y así, todos delincuentes, atenazar nuestros movimientos internáuticos por miedo a las consecuencias legales.

 

domingo, 16 de febrero de 2014

Problemas


Sorprenden algunos con su interminable capacidad para generar problemas y verse envueltos en ellos indefectiblemente. No es que cumplan con ninguna ley fatídica, es que las probabilidades estadísticas de que se escapen de algún lío no existen.

Todos tenemos problemas, cierto, si bien, la persona con juicio, los encierra en un enunciado, planifica una estrategia para afrontarlos y trabaja para obtener la solución más conveniente. Como proponen todos los manuales de Matemáticas: los problemas se plantean, se desarrollan y se resuelven, y, además, como cuando éramos pequeños, sin decimales. En cambio, esta gente conflictiva jamás ha visto un número entero en su vida. Todo son cifras con infinitos decimales.

Allá donde no hay problema, ellos lo encuentran. No pueden evitarlo. Y si tratan de ocultarlo, entonces el problema crece, se duplica no, se multiplica exponencialmente. Recursivamente intentan salvar un problema con otro problema y así hasta provocar la eclosión caótica de todos sus insolubles problemas salpicando de problemas a todos los que le rodean. Pero no importa, vuelven a empezar con otro problema. Incansables.

 

jueves, 13 de febrero de 2014

Televisión



Con insistencia se levantan voces protestando contra los contenidos de las series de televisión: la mayoría giran en torno a la violencia y a la delincuencia. También están las comedias neocostumbristas que curiosamente se sostienen sobre mentiras, enredos y malentendidos. En ambos casos siempre aderezados con sexo.

Uno podría reclamar a la televisión que aprovechase su influencia en el público con un fin más enriquecedor que el de meramente entretener. Ya que alcanza a todos los hogares, sería el medio ideal para reforzar las normas de civismo más elementales y de paso recordar al idiotizado telespectador que tiene una masa pensante y animarle a ejercitar su cerebro. Y aunque esto suene bien, con resignación sabemos que se trata de una cándida propuesta sin futuro.

Los rectores de la televisión solo pretenden beneficios económicos que hagan rentables sus inversiones. Están aplicando los informes y trabajos de psicología y antropología realizados por universidades de prestigio por lo que se presenta complicado desviar su línea de producción. Al fin y al cabo, atrae mucho más el riesgo, lo prohibido o, en su defecto, el morbo, que los buenos modales, y estamos hablando de un negocio. No hay elección.

 

 
 


 

lunes, 10 de febrero de 2014

Oraciones


Todas las religiones establecen la oración como el vínculo comunicativo más directo entre un dios y sus creyentes. Mediante un texto sacralizado los más piadosos pueden hacerle llegar sus inquietudes, sus temores, sus miedos y solicitar así el apoyo y la ayuda necesaria para resistir en este mundo tan materialista.

 Aparentemente se trata de un gesto inocuo, íntimo y desinteresado. Tremendo error. Se mire por donde se mire, detrás de cada plegaria hay una reflexión egocéntrica con una finalidad mucho más mundana. Especialmente aquellos que oran para recibir un favor, un trato especial o un provecho que en condiciones naturales no les correspondía.

El fervor religioso solo reclama injusticia. Se reza para obtener un puesto de trabajo, aunque con ello se desprecie el currículo de los otros aspirantes o se invoca al cielo al empezar una competición para superar a los rivales... así hasta llegar a quien enciende velas a algún santo para que le toque la lotería. En todos los casos la intervención divina implicaría la adulteración por favoritismos en detrimento de merecimientos y del respeto a la igualdad.

En otras palabras, cada vez que alguien reza está pidiendo a su dios que haga trampas. Mal asunto.

 

viernes, 7 de febrero de 2014

Becas


Las becas: para quienes se las merezcan. ¿Cuántos suspensos podemos permitir a un joven manteniéndole una beca de estudios? ¿Cuántos cursos repitiendo se le puede tolerar?

Estas ayudas van dirigidas a estudiantes procedentes de clases menos favorecidas económicamente. Se les brinda la oportunidad de mejorar su estatus social accediendo a unas titulaciones superiores que en otras circunstancias jamás hubiesen podido cursar. Y las oportunidades se aprovechan o se pierden y, además, son contadas. No hay más vuelta de hoja.

Si un buen estudiante debería sentirse totalmente protegido por el estado, en justicia becar a un mal estudiante tendría que ser reprobado. En España entre un 30 y un 50% de alumnos abandonan sus carreras sin finalizarlas. Es obligatorio exigir responsabilidades, tanto a quienes otorgan esas ayudas como a quienes las reciben y desoír el enfrentamiento barriobajero de partidos que se pelean entre los recortes de unos y el paternalismo universal de otros.

Los universitarios deberían iniciar sus protestas desde una cierta autocrítica: reclamar una beca es muy sencillo; demostrar un compromiso, algo que no se ha escuchado a ningún sindicato de estudiantes, ya es otra cosa.

 

 

martes, 4 de febrero de 2014

Atletismo


Confundir el Atletismo con cualquier otro deporte demuestra un total desconocimiento de uno y otro concepto. Detrás de cada atleta, aunque alguno lo ignore, hay toda una respuesta filosófica al sentido de la vida que no se limita a correr más rápido, saltar más alto o demostrar ser más fuerte.

La diferencia más notable está en esa búsqueda de los límites del ser humano, tanto en el tiempo como en el espacio, en plena competición contra sus rivales y contra sí mismo. Por eso, la victoria absoluta, reservada exclusivamente al mejor, le otorga una aureola divina. Sin embargo, detrás de tanto esfuerzo, la única recompensa es la definitiva derrota, que fatídicamente desplaza el efímero éxito del circunstancial vencedor.

Porque todo atleta nace y muere vencido. Irremisiblemente, cumpliendo la sentencia de los dioses, aparecerá un joven que le superará arrebatándole los honores del triunfo. Y en la soledad de la vejez, circunscrito a su doblegado cuerpo, recordará con resignación sus antiguas gestas ahora irrepetibles y de casi todos olvidadas. De esa gloria nada sobrevivirá al castigo del tiempo.

 

sábado, 1 de febrero de 2014

Disfraces


Si alguien quiere pasar un buen rato no tiene más que organizar una fiesta de disfraces. En medio de un ambiente desinhibido se reúne a los amigos envueltos en variopintas y ucrónicas vestimentas. Acertar en la confección de un disfraz estimula la imaginación con la única y sana intención de divertirse.

Es en carnaval cuando el culto a los disfraces pierde su inocencia. Al sentirnos irreconocibles en un acto liberador reforzamos el anonimato y el traje toma licencia para exteriorizar nuestras represiones. Al fin y al cabo es un día y perder la compostura está permitido.

Pero hay quienes invierten los tiempos y se pasan todo el año ocultos bajo un disfraz como si estuviesen en un eterno carnaval. Estúpidos interesados fingen en cada acto, simulan sus intenciones, cubren con embustes sus palabras y ofrecen una desleal amistad. Por fortuna no existe el disfraz perfecto: siempre hay una ocasión que permite desenmascarar el verdadero rostro de quien lo lleva.