miércoles, 29 de abril de 2020

Día 151º de la pandemia del Covid-19

Día 151º de la pandemia del Covid-19. Continúo asintomático. Quienes tienen que enfrentarse a una situación extrema tienen que saber manejar un binomio bélico elemental: estrategia y tácticas de actuación. En un Estado sería: presupuestos y medidas. Ya empezamos mal, porque recordemos que los presupuestos actuales son la prórroga de los que se aprobaron con el anterior gobierno, los del actual partido en la oposición. Y vamos peor, porque las medidas, entre idas y venidas, son incapaces de corregir los puntos más débiles de esos presupuestos.


Las medidas de desescalada que nuestro presidente adelantó, marcando fechas, van dirigidas especialmente para reactivar la economía. El final de estas fases nos conducirán a la nueva normalidad, aunque ya estamos acostumbrados a que a lo largo de este proceso surjan los correspondientes vaivenes, rectificaciones y digo-Diegos, especialidad del Gobierno.


Este programa de desescalada no deja de ser una copia customizada del que se ha puesto en marcha en otros países. Por eso, quizá, no afronte con firmeza el principal punto débil de la estrategia de Estado: la Sanidad. España es el país del mundo donde más ha sufrido el personal sanitario, al que se le sigue forzando día a día y al que se le silencia más y más. Porque España sigue fallando a la hora de proteger su primera línea de combate. Y sin apuntar cambios ni asumir responsabilidades: nuestro presidente festejó en público una octava posición mundial en la realización de pruebas diagnósticas, ignorando voluntariamente que la OCDE ya había rectificado ese informe y nos había hecho descender al puesto decimoséptimo.


Sigamos confiando en nuestras autoridades (porque no hay otras).

No hay comentarios: