domingo, 14 de septiembre de 2014

Dar la vida (por el otro)


         Inevitablemente cuando dos enamorados se juran amor eterno suelen confirmarlo diciendo que serían capaces de dar la vida el uno por el otro, como señal de una entrega mutua absoluta. Visto así, desde el idilio de los enamorados, una relación se tinta de romanticismo, mas, entrados en el día a día no deja de ser una frase tópica y bastante vacía.

         Acaso dar la vida sería arrojarse al mar por el otro tras ser arrebatado por una ola o entrar en un edificio en llamas sabiendo que ha quedado atrapado. Pero no, dar la vida no es una gesta heroica que muestre los extremos del amor. De esos actos heroicos tenemos todos los días ejemplos, donde anónimos héroes se arriesgan por desconocidos, sin esperar nada más a cambio que la satisfacción de haber ayudado.

         No, para dos que se amen, dar la vida debe ser un compromiso diario, un cada día, un cada momento. No hacen falta las heroicidades. Vivir teniendo presente en todo instante que se quiere a una persona para siempre. Y ese desafío, lamentablemente, es mucho más difícil de cumplir.


1 comentario:

Anónimo dijo...

algunos dan la vida entera otros solo dan su media vida