domingo, 20 de abril de 2014

Enseñanza


¿Derecho u obligación? Alentada por los estados democráticos la educación se define como un derecho irrenunciable del individuo. No solo tiene como fin elevar el nivel cultural, cívico y formación de todas las clases sociales, sino erradicar el analfabetismo, la ignorancia y la superstición, oscuros reductos que permiten sobrevivir a la marginación y la desigualdad.

Pura teoría basada en respetables ideales que no casa con la realidad. Un derecho no puede sostenerse sobre una obligación y en sentido inverso, una obligación no puede justificarse respetando la capacidad de elección de los afectados. Actualmente tenemos un porcentaje desolador de absentismo, abandono y fracaso escolar, además de unos indicadores educativos que marcan niveles ínfimos. Es evidente que estas cifras reflejan la respuesta de un amplio número de jóvenes que va obligado a la escuela y la rechaza porque no ve en ella el punto de inicio de su proyección social.

         Difícilmente se podrá corregir esta tendencia desde el terreno de la enseñanza, mientras sirva a una sociedad que hoy por hoy no estimula el esfuerzo ni el éxito intelectual. Y es que se han invertido las formas. Es el individuo quien tiene que sentir la necesidad de aprender y el Estado la institución obligada a satisfacerla.

 

 

No hay comentarios: